Juego de Tronos: juego de tetas.

Dos capítulos después del estreno de Juego de Tronos, ya con dos horas de metraje a cuestas y antes de lanzar las campanas al vuelo, pero lanzándolas sin querer por el buen sabor de boca que nos dejan estas primeras entregas, queda claro que HBO es uno de los pocos reductos del cine de verdad en el país que fue su cuna, en el que su meca, Hollywood, agoniza bajo el reinado silencioso de la moral puritana que impone la MPAA y su utopía de un mundo para todos los públicos.



Las pruebas gemelas de que aún queda sitio para productos dirigidos a un público inteligente, exigente y leído son, atención, las encantadoras tetas de Emilia Clarke, Daenerys Targaryen en la serie y que, para regocijo y profunda reflexión del público masculino, están siendo coprotagonistas de este drama coral de fantasía medieval.


La nueva apuesta de la cadena que nos trajo Los Soprano, The Wire o Boardwalk Empire, es un producto pensado para una audiencia adulta, lejos ya de las apresuradas comparaciones de Juego de Tronos con la obra de Tolkien, que fue llevada al cine con un aire aún más infantil que las novelas en que se basa, si cabía tal posibilidad.

La de George RR no es una obra como la de JRR, eso está claro incluso para mí, que no he leído Canción de Hielo y Fuego, y todo gracias precisamente a ese tratamiento maduro que ahora adivino indispensable para adaptar una obra que tiene todos los ingredientes clásicos de la tragedia shakesperiana: sexo, violencia, poder, traición…






No todo son tetas en esta interesante serie, que aún recién comenzada promete tanto, pero el hecho de que Emilia se pase los dos primeros capítulos con ellas al aire en presencia del futuro Conan -un Jason Momoa que, desde luego, se comporta como un auténtico cimmerio con la pobre chica-, es destacable como ejemplo de una realidad triste: más allá del atlántico no hay Bigas Lunas ni Maribeles Verdúes, ya no, no al menos en el cine, y, de repente, nos sorprende encontrar en una producción norteamericana tanto desnudo y sexo sin sábanas por encima, cosas que, viendo su cine, ya parecen pura ficción. O porno del duro.



1 comentario:

  1. La serie aun no la he disfrutado, pero la chavala es una auténtica monada, no cabe duda...

    ResponderEliminar

Licencia de Creative Commons
Rosebudsonlospadres by Daniel Jaume is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Based on a work at rosebudsonlospadres.blogspot.com.